fbpx

Nace la primera directora de la Felicacia en una organización

Del infierno a la Felicacia en las organizaciones

Eva Cañizares Rivas

  • Abogada y gestora de iidd.
  • Gerente de la Felicacia en MoMAFIT.
  • Cofundadora de la Asociación Española para la Calidad Ética en el Deporte.
  • Miembro de la Mesa de Expertos para la elaboración de la nueva Ley del Deporte.

Hoy dedicamos este apartado a entrevistar a Eva Cañizares Rivas, una abogada que se ha dedicado en los últimos años a la gestión deportiva y que se ha convertido por convencimiento propio en ser la primera gerente de la Felicacia en España y por lo tanto en el mundo.

Esta es la sabrosa entrevista que le he hecho y de la que estoy seguro que los lectores disfrutarán y en muchos aspectos se identificarán.

¿Cómo una abogada como tú se ha dedicado a la gestión deportiva? Son dos sectores totalmente diferentes.

Hace unos quince años me contrataron como abogada en una concesión administrativa para recurrir todas las resoluciones del ayuntamiento concedente, con el que aquella tenía una relación muy conflictiva y complicada. Al mes, me pusieron de responsable del área de administración y al año de directora del centro. Y, con lo que me gusta el trato con las personas, no dudé en seguir trabajando en la gestión deportiva compaginándolo con el ejercicio de la abogacía; para mí era impensable volver al despacho a trabajar sola con lo bien que estaba trabajando rodeada de los trabajadores y los usuarios. Además, aunque sean dos profesiones diferentes, mis conocimientos en Derecho me ayudan mucho en los aspectos más jurídicos de la gestión.

 

Acabas de crear tu propia empresa deportiva, MoMAFIT. ¿No crees que el sector está un poco saturado?

No creo que esté saturado, creo más bien que la oferta se ha vuelto muy poco original. La gran mayoría de los centros ofrecen servicios muy parecidos, con un servicio nada personalizado, en el que los usuarios son números y no personas. Y eso provoca aburrimiento y apatía en los clientes, que ven cómo cada día se transforma en el día de la marmota.

En mi opinión, la pandemia ha provocado una forma radical de ver el fitness, porque de repente la salud está en la mente de todos. Pero ahora se buscan espacios más amplios, nada de aglomeraciones, clases más reducidas, personalizadas y divertidas y, sobre todo, un entrenamiento y un trato personal más humanizados. Aprovechando esas necesidades creadas por el covid, hemos creado un concepto de entrenamiento diferente, ofertando las actividades más demandadas, como son aquellas tipo crossfit, fitboxing y entrenamiento funcional, en grupos reducidos, evitando multitudes y en un entorno espacioso y de techos altos, con mucha ventilación e iluminación naturales, aprovechando también exteriores para hacer la actividad al aire libre.

Has trabajado antes como asalariada en otras empresas del sector. ¿Qué ha sido lo mejor y lo peor?

Mi experiencia profesional ha sido casi siempre increíble y satisfactoria, independientemente de ser o no trabajadora por cuenta ajena. En casi todas las empresas me han dado amplias facultades para gestionar y conseguir los objetivos marcados desde arriba. Y eso ha propiciado que haya gestionado siempre implementando los principios de la Felicacia –aunque mis jefes se tomaban a broma “eso de la Felicacia”-, creando un entorno laboral feliz y satisfactorio tanto para trabajadores como para usuarios y, como consecuencia de ello, el centro más rentable de la compañía.

Mi peor experiencia ha sido en una de las empresas en las que he sufrido directamente las consecuencias de una gestión totalmente ajena y opuesta a la Felicacia, donde han imperado el miedo, la desmotivación, la incertidumbre, la desconfianza, la mediocridad y, como resultado de todo ello, el estrés laboral. Un infierno que me ha reafirmado en la necesidad de una gestión felicaz.

Te has definido a ti misma como gerente de la felicacia en tu empresa. ¿Qué experiencias te han llevado a ello?

La primera vez que escuché hablar de la Felicacia fue a un profesor que me dio clases en el Máster de Gestión Deportiva de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de Granada. Concretamente, a su creador J. Y me enamoré del concepto y de todo lo que significa.

“Me han reafirmado en mi fe en la Felicacia como única forma de gestión empresarial satisfactoria para todos los componentes de la organización y para la propia empresa”

Me impactó porque iba muy en la línea de cómo yo concebía la gestión y el trato a las personas en las empresas. A partir de ahí, empecé a poner en marcha algunas prácticas felicaces que iba conociendo, en la medida en que las empresas me lo permitían, e incluso llegué a proponer a algunos de mis jefes crear el puesto de gerente de la Felicacia, pero nunca han sido propicios a ello a pesar de los magníficos resultados de la gestión felicaz que llevábamos en el centro. Todo ello y, como ya he dicho, una experiencia absolutamente negativa que me llevó a soportar un infierno laboral, me han reafirmado en mi fe en la Felicacia como única forma de gestión empresarial satisfactoria para todos los componentes de la organización y para la propia empresa.

Por eso cuando hemos creado MoMAFIT no lo he dudado. Quería ser gerente de la Felicacia, porque, en mi opinión, es imprescindible para diseñar el resto de puestos dentro de la empresa y fomentar un ambiente de bienestar óptimo para el desarrollo del capital humano -el capital más importante dentro de la organización- y con ello aumentar la productividad y disminuir la rotación de personal.

La Felicacia es una forma de gestión empresarial enfocada a las personas, que pretende humanizar las organizaciones.

¿Sabes que eres la primera persona gerente de la felicacia en el mundo empresarial? ¿Cómo te hace sentir eso?

Me hace inmensamente feliz, y esa felicidad se nota y se transmite a mi alrededor. Y mucho. Lo que me hace sentirme cada vez más convencida de las bondades de la Felicacia. Lo que quiero para mí es lo que les doy a los demás. Y recibo el doble de lo que doy.

¿Qué es para ti la Felicacia? ¿Cómo piensas aplicarla en tu organización?

Como ya he expuesto, la Felicacia es una forma de gestión empresarial enfocada a las personas, que pretende humanizar las organizaciones, imprescindible para diseñar el resto de puestos dentro de la empresa y fomentar un ambiente de bienestar óptimo para el desarrollo del capital humano y la productividad empresarial.

MoMAFIT es un concepto novedoso de entrenamiento integral que está gustando mucho entre nuestros clientes, a los que conocemos y tratamos personalmente y a cuyas capacidades se adaptan las clases. El objetivo es que el cliente entrene y se divierta, que no salga frustrado y desmotivado porque no tiene el nivel del resto de atletas o usuarios de la clase, sino que disfrute muchísimo en cada entrenamiento y esté deseando volver.

Y lo mismo que queremos para el cliente lo queremos para el trabajador. MoMAFIT es una empresa que cree en la felicidad de las personas en aras de una mayor eficiencia de gestión de la organización, donde la ética es nuestro valor principal, lo  que nos hace estar comprometidos con nuestros trabajadores y clientes. Somos una empresa felicaz, en la que la felicidad de las personas y la eficacia empresarial son dos elementos que se complementan y que se necesitan para llevar a cabo un crecimiento sostenido y productivo.

Mi trabajo como gerente de la Felicacia en MoMAFIT va a ser:

  • Primero, identificar cuáles son las motivaciones de mi equipo, primordial porque todas las estrategias que diseñe tienen que agregar valor tanto a la vida como al trabajo de mis compañeros, de forma que cada día encuentren en MoMAFIT un espacio adecuado para poder desarrollarse feliz y plenamente.
  • Segundo, cuidar el clima organizacional para que todos los miembros del equipo MoMAFIT sepamos qué podemos aportar para sentirnos bien en el día a día, que estemos satisfechos con lo que logramos en nuestro trabajo y que veamos el futuro en nuestra organización como algo valioso. Quiero conseguir que los técnicos no se vean solo como un monitor que imparte una clase dirigida, sino que se vean como una persona que ayuda a otras personas a sentirse mejor física y psíquicamente. Porque si piensan que su trabajo es importante lo verán de manera distinta y más positiva. Como gerente de la Felicacia procuraré hacerles esto más evidente.

¿Has pasado por el infierno organizacional en alguna empresa del pasado? ¿Qué has aprendido?

De todo lo negativo siempre puedes extraer algo positivo y a mí, esa experiencia tan negativa, me ha servido para demostrarme y confirmarme lo que jamás debes hacer como líder de un equipo, cómo no hay que tratar a las personas, y me ha enseñado aún más el inmenso valor de todas y cada una de las personas con las que te relacionas y, sobre todo, la necesidad de humanizar las organizaciones y el trato personal. Quien no lo cree no sabe la infinita felicidad que produce ver felices a los que te rodean y, sobre todo, sentir que tú haces posible esa felicidad.

¿Cómo ves tu futuro en los próximos años?

Muy felicaz. 

Alguna recomendación al sector deportivo, desde tu experiencia.

Gestionar desde la ética –tan importante y tan olvidada- y la concienciación sobre la importancia del cuidado del físico, la mente, el espíritu y el entorno, sobre la relevancia de políticas internas que ayuden al crecimiento de las personas y generen un impacto positivo en las organizaciones donde se desarrollan. Porque un empleado feliz hace felices a las personas que le rodean, a nuestros clientes. En este sentido, es importante y necesaria la implicación de los directivos en la Felicacia como manifestación de la cultura ética de la empresa, pues en este ámbito lo único que verdaderamente funciona son el testimonio y el ejemplo, no el mandato y el código imperativo y categórico: una cultura ética sana que produzca personas felicaces.

Por ello, en mi opinión urgen actuaciones de concienciación y sensibilización capaces de hacer reflexionar, así como la implementación de la Felicacia en las organizaciones para cambiar nuestras actitudes y tratar de potenciar aquellas que hacen posible un mundo distinto.

BLOG